Gourmet on the road
Ya no hay que ir al cine para verlos: están invadiendo Lima. Ya no sólo fuera de las universidades, o de un concierto, o una discoteca, tanto de día como de noche, los food trucks han venido a redefinir el concepto de comida "callejera".
Nos reunimos con Carlos «Chicho» Chong, dueño de Lima Food Trailer, para que nos cuente un poco sobre su negocio y nos de algunos consejos sobre este business.
¿Cómo se animaron a comenzar este negocio? Porque es algo bastante nuevo, casi una moda.
Es algo nuevo en Lima, pero tiene más de 40 años en el mercado. Nosotros, por cuestiones de viajes, siempre los veíamos. Y conocimos la amplitud del negocio, que se puede trasladar a muchas cosas: trucks de trabajo, ambulancias, puestos de vigilancia. Entonces, para introducirlo en el mercado, nos orientamos a lo que está más en boga ahora acá, que era la comida.
¿Cuáles son los focos de food trucks en Lima?
Existen muchos. De hecho, el de San Isidro (Calle Coronel Andrés Reyes), puede ser el que tiene más vitrina, pero existen muchos otros puntos, como el Pentagonito (San Borja), o los mismos conos. Surco y Barranco ya comienzan a dejar que el movimiento avance. Hay varios puntos.
¿Qué hacen aquí en Lima Food Trailer?
Nosotros diseñamos y fabricamos food trucks en versión remolque. Los clientes traen sus proyectos, y lo ayudamos a concretarlo en la parte técnica, en el concepto y en la fabricación. Y, si es posible, con todos los socios estratégicos: ya sea un sistema de cajas, un sistema de pago, los complementos gastronómicos, los equipos, etc.
¿Es un negocio caro?
A comparación de un local, ya sea una grande o uno pequeño, es muy barato. Un remolque como los nuestros arranca en un proyecto base que va de los $8.000 a los $10.000, y un equipamiento gastronómico que no debería superar los $3.000 a $5.000, exagerando.
¿Cada cliente debe traer su propio remolque o ustedes lo fabrican?
Lo hacemos todo, no reutilizamos ni los adaptamos. Nuestros remolques no están hechos de metal, no tienen fierro ni son pesados. Y son mucho más duraderos. Los hacemos con la misma ingeniería que un yate, que una lancha. Materiales similares.
Y, ¿cuánto tiempo demoran en entregarlo entre que el cliente los contacta y se termina el diseño?
Nosotros lo entregamos entre treinta y cuarenta días. Igual, durante todo ese tiempo siempre estamos cerca del cliente, porque el tráiler es como un hijo para todos. Están con nosotros todo el tiempo para que vean cómo lo vamos confeccionando.
¿Algún consejo para quien decide aventurarse en esto?
Empieza tú mismo. Tú mismo sé el cocinero, conoce el negocio. No te llenes de equipos, róbate la refrigeradora de tu casa, y, poco a poco, anda haciendo caja. Un equipo caro no va a funcionar mejor que uno de tu casa, lo que va a hacer es que tú vayas más rápido. Y luego, cuando tengas más público y debas trabajar rápido, ahí puedes invertir en algo más grande. Pero al principio es bueno conocer el negocio y saber en qué te estás metiendo. Poco a poco ir avanzando.
Para todos los interesados en contactar a Carlos Chong y Lima Food Trailer, sus números son +511 422 5204 y +51 997 528 555. Además, pueden visitar su portal web www.limafoodtrailer.com.
Fotos: Difusión.
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